Zoe Cubeiro es una joven apasionada por la economía internacional y el desarrollo. Desde adolescente, comenzó a interesarse por el impacto que tienen las decisiones financieras y políticas en la vida cotidiana de las personas comunes.
Empezó a estudiar Economía en la Universidad Complutense de Madrid y de a poco empezó a convertirse en una voz que representa a su generación en debates y modelos de Naciones Unidas.
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Junto a su padre, Juan Carlos Cubeiro, ha escrito el libro La disrupción del liderazgo femenino, donde presentan a 12 mujeres líderes que han demostrado ser agentes de cambio, desafiando estereotipos y abriendo camino para generaciones futuras.
En esta entrevista, la joven cuenta más sobre la experiencia de escribir un libro, sus intereses y aspiraciones y las preocupaciones de su generación.
¿Cómo responderías a la pregunta “quién sos” en un párrafo?
Soy una persona que me interesa mucho entender las diferentes complejidades dentro del mundo económico. Una estudiante de economía con aspiraciones de influir en el futuro de los países mediante diferentes variables. Que me encanta conocer diferentes culturas y aprender cosas de ellas para poder seguir formándome.
¿Por qué te ha empezado a interesar la Economía? ¿Cómo has decidido que era lo que querías estudiar? ¿Qué es lo que te interesa ahora?
Mi interés por la economía comenzó en el instituto, ya que me llamó mucho la atención cómo las decisiones financieras y políticas impactan directamente en la vida cotidiana. Al principio no lo tenía muy claro, pero luego observé las muchas salidas que tiene la carrera en sí y la formación completa que me iba a proporcionar.
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Actualmente, estoy interesada en la economía del desarrollo y en la convergencia o divergencia entre países. También me atrae la economía del medio ambiente, especialmente cómo las diferentes políticas pueden ser implantadas para luchar contra el cambio climático.
¿Quiénes han sido tus referentes cuando eras niña? ¿Quiénes son ahora?
Cuando era niña, mis referentes siempre han sido diferentes deportistas y figuras que combinaban la inteligencia con sus respectivas pasiones. Me inspiraba en personajes históricos como Amelia Earhart, por su dedicación a la aviación y su habilidad para superar barreras en un campo dominado por hombres.
Mis referentes siempre han sido deportistas y figuras que combinaban la inteligencia con sus respectivas pasiones
Hoy en día, mis referentes han evolucionado hacia personas que han hecho contribuciones significativas en el campo de la Economía. Admiro a economistas como Amartya Sen por su enfoque en la economía del bienestar y la justicia social, y a Esther Duflo por su trabajo dentro de la economía del desarrollo.
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¿Cómo ha sido la experiencia de escribir un libro junto a tu padre? ¿Por qué dirías que es necesario un libro como La disrupción de liderazgo femenino?
Escribir un libro junto a mi padre ha sido una oportunidad para fusionar nuestras perspectivas, creando un diálogo intergeneracional sobre diferentes temas. A través de este proceso he aprendido mucho ya que me aportaba su opinión y entendimiento. Esta colaboración ha fortalecido nuestro vínculo y nos ha permitido explorar los temas mencionados en el libro.
Nuestro libro es necesario porque aborda un tema crucial y a menudo subestimado en la sociedad actual. Mediante el libro se busca desafiar las normas tradicionales y promover un cambio en cómo se percibe y valora el liderazgo femenino en diversos ámbitos, desde la economía hasta la política.
¿Cuáles crees que son las mayores preocupaciones de tu generación en España? ¿Qué soluciones propondrías?
Entre las principales preocupaciones de mi generación destacan el desempleo juvenil, la inestabilidad económica y la igualdad de oportunidades. La incertidumbre política y la desigualdad social también son cuestiones que nos generan una profunda preocupación. Sobre todo, que podamos tener el futuro que tuvieron nuestros padres.
Las preocupaciones de mi generación son el desempleo juvenil, la inestabilidad económica y la igualdad de oportunidades
Desde mi punto de vista, las soluciones para estas preocupaciones serían: fomentar políticas que impulsen la creación de empleo cualificado, especialmente en sectores tecnológicos e innovadores, e invertir en educación para dar la posibilidad a los jóvenes de formar parte de un mercado laboral moderno. Otra solución que propondría es fomentar un diálogo entre diferentes sectores y los jóvenes para que puedan saber qué necesitan tener las empresas y qué pueden ofrecer a las nuevas generaciones.
¿Cuáles consideras que son los principales desafíos que tiene la clase política para hacerse eco de las demandas de la juventud?
Sobre todo, yo creo que los principales desafíos son reducir la brecha generacional, ya que se observa una subestimación de las preocupaciones que tienen los jóvenes; la necesidad de incrementar la participación de los jóvenes, adaptándose mejor a tecnologías y el uso de redes sociales, y, por último, la atención a temas como la igualdad de género, que son primordiales para nosotros y que a veces crea desconfianza en las instituciones encargadas de ello. Por lo tanto, es muy importante escuchar a los jóvenes y que estén involucrados en todo momento, adaptando métodos distintos para afrontar las nuevas necesidades en un futuro incierto.
Es muy importante escuchar a los jóvenes y que estén involucrados en todo momento
¿Cuáles son tus aspiraciones a futuro?
Mis aspiraciones a futuro son dos. Primero formar parte de un organismo internacional, para así poder trabajar en un entorno global y contribuir a diferentes políticas con impacto a nivel mundial, y así aprender más habilidades diplomáticas y la adaptabilidad a problemas económicos.
Por otro lado, seguir formándome como profesional, no solo continuar aprendiendo diferentes aspectos dentro de la economía sino también idiomas y apliaciones. Ambas para poder seguir creciendo como profesional.
Más sobre Zoe Cubeiro
Graduada en Economía en la Universidad Complutense de Madrid, Behavioral Finance en Duke y Game Thory en Stanford destaca en debates y modelos de Naciones Unidas, donde ha demostrado su habilidad para analizar problemas globales, proponer soluciones y comunicarse de manera efectiva. Ha representado a su universidad en varias conferencias y ha recibido reconocimientos por su compromiso y habilidades en la diplomacia internacional.
