Las líderes femeninas españolas están infrarrepresentadas en la conversación social, con una visibilidad muy inferior a la de los líderes masculinos. Así lo revela “Mujeres líderes en el umbral de la visibilidad. Análisis de la conversación digital sobre referentes en la política, la empresa y el periodismo”, un estudio publicado por Llorente y Cuenca (LLYC), firma global de consultoría de comunicación, marketing digital y asuntos públicos.
Para su realización, se estudiaron las conversaciones de 360 hombres y 360 mujeres líderes en 12 países (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, España, Estados Unidos, México, Panamá, Perú, Portugal y República Dominicana) con perfiles en la red social Twitter.
“El informe es fruto de nuestra convicción de que la visibilidad del talento femenino es un acelerador de la igualdad, porque normaliza la presencia de mujeres en todos los sectores y disciplinas, facilita referentes para nuevas generaciones y promueve modelos de éxito y liderazgo diversos. Este análisis se lanza a la búsqueda de respuestas a por qué muchas mujeres no se deciden a traspasar el umbral de la visibilidad”, explica Luisa García, socia y CEO Europa de LLYC, y candidata Top 100.
“El informe es fruto de nuestra convicción de que la visibilidad del talento femenino es un acelerador de la igualdad», explica Luisa García, socia y CEO Europa de LLYC, y candidata Top 100.
En este sentido, el informe estudia las diferencias en la atención que se presta a las mujeres, sobre todo en el tono y el contenido de las conversaciones generadas en torno a ellas, frente a los hombres. Asimismo, pretende encontrar posibles razones por las que se sitúan ante ese umbral. Para ello, se han procesado 11,5 millones de mensajes publicados en Twitter durante un año (1/02/21 al 31/01/22), compuestos por casi 70 millones de palabras, y análisis de sentimientos para la evaluación cualitativa.
Entre las principales conclusiones están las que señalan que las mujeres son citadas en poco más de 1 de cada 3 mensajes (38%), y que la proporción se recrudece aún más en las líderes del sector empresarial, presentes en 1 de cada 5 mensajes (20%).
El informe estudia las diferencias en la atención que se presta a las mujeres, sobre todo en el tono y el contenido de la conversación generada en torno a ellas.
El umbral de la visibilidad
Para las mujeres, hacerse más visibles no es una tarea tan sencilla. Pues, el informe señala que según estudios publicados en Harvard Business Review, el gap de «autopromoción», es decir, la diferencia de esfuerzos que dedican las mujeres en comparación con los hombres a poner en valor sus logros, darse a conocer en el mercado y generar visibilidad de su perfil profesional es hasta del 33%.
Uno de los factores que más podría influir es el «doble lazo», efecto por el cual las acciones de visibilidad en ellas generan un resultado contrario al deseado y, por tanto, temen ser penalizadas si se promocionan. Mientras que para ellos no supone castigo sino, a veces, hasta un aplauso.
Por mencionar algunos números de España en este aspecto, las políticas son tachadas de un carácter impulsivo y caótico: confusión, falta de disciplina e histeria reciben una negatividad de entre un 20% y 53% mayor que cuando se refiere a hombres.
El estudio pretende encontrar posibles razones por las que las mujeres líderes se sitúan ante el umbral de la visibilidad.
Mientras que las empresarias son definidas con cualidades como amargadas, frustradas y enfadadas, con un sentimiento de entre un 66% y un 100% más de negatividad que hacia ellos, atributos que pretenden describir a mujeres que ejercen posiciones de liderazgo y control.
En el caso de las periodistas, términos relativos a eficiencia, ejecución e incompetencia exigen un sobreesfuerzo con respecto a los hombres, que se plasma en el doble de negatividad.
Características de las conversaciones
Dentro del análisis, además, se especifican algunas marcas dentro de las conversaciones para ayudar a entender las posibles causas de una menor visibilidad de mujeres líderes. Tal es el caso de los comentarios relacionados con la ropa y la apariencia o los insultos que reciben por su género y su condición sexual, como fórmula para la demagogia o para restar profesionalidad a sus acciones.
En cuanto a la familia, la pareja sentimental es referida un 22% más en ellas, asociando su imagen a la trayectoria profesional del cónyuge como “mujer de”, y sucede más del doble de veces en el caso de las empresarias. También se evalúa lo referido al liderazgo, la carga emocional y la búsqueda de éxito.
Puedes acceder al informe completo, pinchando aquí.