“Dependiendo de nuestras experiencias en la vida, particularmente como niños pequeños, nuestro cerebro tendrá un tono general general o subyacente y esto se manifiesta como pensamientos automáticos”, explica Jacqueline Carson, hipnoterapeuta clínica y psicoterapeuta .
Y agrega: “Si nuestras experiencias han sido negativas o si hemos estado sujetos a un trauma, por ejemplo, esos recuerdos almacenados, experiencias sensoriales y emociones vinculadas generarán pensamientos negativos automáticos”.
Si bien un pensamiento negativo aislado puede no parecer gran cosa, verse inundado con estos pensamientos una y otra vez puede comenzar a influir en su comportamiento, lo que a su vez puede afectar su salud mental. Por ejemplo, si tiene un ANT que le dice «nunca seré lo suficientemente bueno», puede experimentar una disminución de la confianza y un estado de ánimo bajo, lo que a su vez podría impedir que se presente para nuevas oportunidades. Esto puede convertirse en un ciclo, transformando esa ANT en un combustible que exacerba la mala salud mental.
“Los pensamientos negativos automáticos pueden afectar todas las áreas de la vida y pueden provocar estrés crónico, mal humor, depresión y ansiedad ”, dice Carson.
“Esto en sí mismo puede provocar dolencias físicas como dolores, palpitaciones y ataques de pánico. Cuando el cerebro y el cuerpo experimentan estos pensamientos y sentimientos negativos, hormonas como el cortisol y la adrenalina inundan el cuerpo. El cuerpo está en un estado constante de ‘lucha o huida’”.
Sin embargo, el hecho de que tenga ANT no significa que esté atrapado con ellos para siempre. Es por eso que la terapia cognitiva conductual (CBT) se enfoca tanto en desafiar las ANT: una vez que reconoce las ANT y comienza a desafiarlas, está en un mejor lugar para romper ese ciclo y desarrollar creencias fundamentales nuevas y útiles.
Para comenzar, Carson recomienda concentrarse en el origen de sus ANT. “Comience por reconocer estos pensamientos pero no creyéndolos. ¿Estás obsesionado con el pasado? ¿Te preocupa el futuro? ¿Eres propenso al pesimismo? Sepa que estos no son realmente usted, provienen del subconsciente profundamente arraigado, y hay cosas que puede hacer para cambiar cómo se siente y piensa. La mente y el cuerpo son bidireccionales”.
Una vez que haya identificado las ANT que está experimentando, es hora de desafiarlas. Esto se puede hacer de muchas maneras diferentes, desde participar en una sesión de terapia hasta explorar sus pensamientos y sentimientos en un diario.
La hipnoterapia y la meditación también pueden ser útiles, sugiere Carson. “Estas dos modalidades lo ayudarán a ingresar a la mente subconsciente y lo ayudarán a cambiar su asociación con sus recuerdos y cómo se siente con respecto a ellos. La hipnoterapia puede ayudarte rápidamente a reprogramar y reconfigurar los pensamientos negativos, mientras que la meditación te enseñará a buscar el espacio entre los pensamientos y traerá calma a tu mente y cuerpo”.
Entonces, la próxima vez que se sienta ansioso o deprimido, intente tomarse un momento para pensar qué ANT subyacente podría estar alimentando cómo se siente. Puede que no sea una solución rápida, pero conocer la forma en que funciona su cerebro lo ayudará a cuidar su salud mental a largo plazo, y eso solo puede ser algo bueno.