Laura Sagnier es investigadora social y autora especializada en las desigualdades que afectan a las mujeres en el ámbito doméstico y familiar. A lo largo de los últimos años, ha recopilado datos que muestran una realidad persistente en España: en la mayoría de las parejas heterosexuales, las mujeres asumen de forma mayoritaria las tareas del hogar y el cuidado de familiares. Esta carga desigual, que ella denomina “la Losa de Hormigón”, limita significativamente las oportunidades vitales y profesionales de las mujeres.
Con el objetivo de generar conciencia y promover un cambio real, Sagnier ha producido recientemente un vídeo titulado La Balanza de la Equidad, lanzado el pasado 23 de marzo, coincidiendo con el Día Nacional de la Conciliación y la Corresponsabilidad. El vídeo invita a reflexionar sobre la necesidad de compartir de forma justa las responsabilidades en la pareja, como condición imprescindible para lograr una verdadera igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres.
En esta entrevista, Laura analiza las causas de esta brecha invisible, cuestiona los límites de los avances legales y propone herramientas concretas para fomentar relaciones más equitativas. A través de su trabajo, busca no solo visibilizar el problema, sino también impulsar conversaciones y decisiones que permitan avanzar hacia un modelo de convivencia más justo y corresponsable.
Laura Sagnier: «Se sigue asociando a las niñas con roles de cuidado, emociones y estética, y a los niños con fuerza, liderazgo y tecnología«
¿Qué te llevó a producir este vídeo sobre la “Balanza de la Equidad”? ¿Qué reacción esperas provocar en quien lo vea?
Quería concienciar de los peligros que tienen las relaciones de pareja no equitativas, tanto para la persona que soporta la inequidad como para el conjunto de la sociedad. Me inquieta lo poco preocupada que está la sociedad por una situación que en España erosiona la vida de casi 6 millones de mujeres, sobre todo si son madres.
Pensé que un vídeo contribuiría a generar debate sobre un hecho del que muy pocas personas son conscientes. Hasta que las parejas sean equitativas, las mujeres no tendrán las mismas oportunidades en la vida que sus compañeros, por mucho que tengan acceso a las universidades, las leyes sean igualitarias y en las empresas haya planes de igualdad.
El vídeo se centra en el concepto de la «Balanza de la Equidad«. Una balanza que solo estará equilibrada cuando los miembros de la pareja compartan de forma justa el peso de las cargas diarias que les atañen como pareja o como familia.
Espero que este vídeo contribuya a: sensibilizar sobre los costes de las relaciones no equitativas y los beneficios de las que sí lo son, ayudar a muchas mujeres a iniciar una conversación compleja e incómoda con su pareja, motivar a las nuevas parejas a ser equitativas desde el primer día.
«Hasta que las parejas sean equitativas, las mujeres no tendrán las mismas oportunidades en la vida que sus compañeros»
¿Cómo nació el concepto de la “Losa de Hormigón”? ¿Qué buscas transmitir con esta metáfora?
Creé el concepto «Losa de Hormigón» para dar visibilidad a uno de los resultados de mi primera investigación sobre las mujeres en España: en dos de cada tres parejas convivientes, ellas realizan el 69% de las tareas de la casa y se ocupan del 69% de la crianza de los hijos o hijas.
La consecuencia más inmediata de esto es que ellos disponen de más tiempo para sus cosas, por lo que consiguen recargar sus pilas, estar en mejor forma física y en buen estado emocional. A medio y largo plazo, pueden tener mayor independencia económica que ellas y también mucha más libertad.
El concepto de «Losa de Hormigón» pretende transmitir, por un lado, el peso que sienten las mujeres que se ocupan prácticamente en solitario de las cargas familiares y, por otro, la incomprensión a la que muchas se enfrentan por parte de su compañero de vida.
¿Por qué crees que, a pesar de los avances legales y los planes de igualdad en las empresas, seguimos con este desequilibrio tan fuerte en el ámbito doméstico?
Porque es mucho más fácil cambiar las leyes que las normas invisibles que rigen la sociedad y que campan a sus anchas entre las cuatro paredes de las casas. Y estas normas invisibles siguen educando a mujeres y hombres de forma muy distinta, tanto en la infancia como en la adolescencia. Se sigue asociando a las niñas con roles de cuidado, emociones y estética, y a los niños con fuerza, liderazgo y tecnología.
Cada día que pasa estoy más convencida de que hasta que no eduquemos a las niñas y a los niños de la misma forma -en todos los ámbitos que inciden en su educación, como núcleo familiar, centros educativos, medios de comunicación, redes sociales-, las mujeres tendremos que luchar mucho para lograr que haya equidad si convivimos con un hombre, sobre todo si hemos decidido ser madre.
«Es mucho más fácil cambiar las leyes que las normas invisibles que rigen la sociedad»
¿Cómo podemos enseñar a identificar y nombrar esa carga en la infancia y la adolescencia, antes de que se convierta en algo normalizado en la edad adulta?
Creo que la única forma es que el padre y la madre practiquen con el ejemplo, que formen un verdadero equipo que se apoya cuando uno necesita al otro. Ninguno tiene más poder que el otro, aunque las responsabilidades no sean las mismas. Los hijos e hijas aprenden sobre todo de lo que observan.
¿Cuál sería tu mensaje más directo a una pareja que está empezando a convivir hoy?
Les recomendaría que, antes de iniciar la convivencia, se prepararan para ser una pareja equitativa. Les sugeriría tres cosas: que vean el vídeo de la Balanza de la Equidad, que lean el eBook #STOPLosaDeHormigon (está disponible de forma gratuita en laurasagnier.com), que revisen y comenten con calma las Capitulaciones Matrimoniales basadas en la Equidad (pueden descargarlas también en la web).
¿Qué estrategias prácticas propondrías para que las parejas puedan distribuir de forma más justa las tareas domésticas y de cuidado?
Si llevan tiempo conviviendo, en primer lugar, les diría que han de tener mucha paciencia, porque es muy difícil cambiar hábitos que llevan años consolidándose. Les propondría responder juntos al test del “Termómetro de la Equidad”. Les servirá para revisar cuanto aporta cada uno a la relación y les dará un punto de vista objetivo y cuantitativo de hasta que punto su relación es o no equitativa. A partir de aquí podrán o bien celebrar que son una pareja equitativa o bien iniciar una conversación constructiva sobre en qué ámbitos pueden mejorar.
