67,9 sobre 100 es la puntuación que recibe la Unión Europea (UE) en el último índice de Igualdad de Género, según el Instituto Europeo para la Igualdad de Género (EIGE). Este análisis pone de manifiesto que nuestro continente solo mejora medio punto cada año. De seguir así, estaríamos a unos 60 años de conseguir una completa igualdad.
Aunque se han observado pequeñas mejoras en los últimos años, la directora de la EIGE, Carlien Scheele está especialmente preocupada por la situación de la pandemia, ya que asegura que “supone una grave amenaza para el progreso de la igualdad de género (…). Más que nunca, los responsables de la formulación de políticas tendrán que utilizar los resultados de nuestro Índice para diseñar soluciones inclusivas que promuevan la igualdad entre los géneros en nuestra sociedad, tanto durante como después de la pandemia».
Suecia, Dinamarca y Francia son los tres países que mejores puntuaciones recogen en igualdad de género. Por su parte, los últimos puestos en el ranking los ocupan Grecia, Hungría y Rumanía. Y entre los países que más han mejorado en los últimos años destacan Luxemburgo, Italia y Malta.
Segregación por géneros en el ámbito laboral
Las mejoras en igualdad de género en la UE se registran en el sector privado. Esto se debe, fundamentalmente, a un mayor equilibrio en los consejos de administración en las empresas europeas. De hecho, en Bélgica, Dinamarca, Alemania, Italia, Países Bajos, Finlandia y Suecia tienen casi un tercio de los consejos de administración de sus compañías formados por mujeres. En Francia es el 40%.
Sin embargo, a pesar de estas cifras, el cambio sigue siendo aún muy lento. Además, la situación dista mucho en otros países, en los que las cifras de las mujeres en puestos directivos sigue a años luz de las de los hombres. Y es que uno de los mayores problemas que frenan la igualdad de género es la segregación en la educación y en el trabajo.
solo dos de cada diez puestos de trabajo en el sector de las TIC están ocupados por mujeres
A pesar de los esfuerzos e iniciativas propuestas, la segregación por géneros ha aumentado desde el año 2010. Se han puesto en marcha diferentes medidas para fomentar la educación de ciencias o ingenierías entre las mujeres. Pero hoy día en la UE, solo dos de cada diez puestos de trabajo en el sector de las TIC están ocupados por mujeres.
Por el contrario, el sector de la asistencia está representado por ellas, y se observa una falta de hombres: solo representan el 15% de los trabajadores de enfermería y cuidados personales en los servicios de salud.
La igualdad de género debe buscarse en todos los ámbitos de la vida para que todos los europeos (sean del género que sean) puedan alcanzar sus metas profesionales, tal y como ha asegurado Helena Dalli, Comisaria Europea de Igualdad. En este sentido, el Índice de Igualdad de Género es una herramienta muy útil para poder analizar los datos y realizar un buen seguimiento de los progresos.