Esther Valdivia es fundadora del magacín digital Mujeres a Seguir, una iniciativa que nació con un propósito claro: dar visibilidad al talento femenino que suele quedar en segundo plano. A lo largo de los años, la iniciativa ha evolucionado hasta convertirse en un espacio de referencia que combina periodismo, análisis y reconocimiento a través de sus premios, foros y contenidos digitales.
En esta conversación, Valdivia repasa la trayectoria del proyecto y reflexiona sobre los retos que aún persisten en materia de igualdad. También aborda el papel de las empresas como agentes de cambio y el horizonte hacia el que aspira: un escenario en el que la visibilidad de las mujeres sea natural y no dependa de iniciativas específicas.
Esther Valdivia: «El talento femenino es un conjunto de experiencias y visiones que las mujeres aportan al mundo»

¿Cómo ha evolucionado el propósito de Mujeres a Seguir desde su creación hasta hoy?
La motivación principal de la marca es dar visibilidad al talento femenino que habitualmente permanece en un segundo plano. En ese sentido, Mujeres a Seguir nace con una misión clara: ofrecer un espacio donde “las mujeres que suman” puedan ser reconocidas y servir de inspiración para otras.
¿Cuáles considera que son los principales obstáculos que aún afrontan las mujeres en el mundo profesional?
Hay varios, pero me gustaría destacar tres:
- La brecha de acceso y de representación, especialmente en comités de dirección y consejos de administración
- La cuestión de la formación y la base; por ejemplo, en ámbitos STEAM las mujeres son menos numerosas desde el origen, lo que luego condiciona las trayectorias.
- La infrarrepresentación mediática y de fuentes; cuando es más habitual recurrir a voces masculinas, se contribuye al denominado “techo de papel”.
¿Qué papel cree que deben jugar las empresas para avanzar hacia la igualdad real?
Las empresas tienen una responsabilidad doble: una interna —que implica políticas, cultura y gobernanza— y otra externa —la de influir en la sociedad como motor de cambio. Las empresas que no solo dicen que la igualdad es importante, sino que lo demuestran estructuralmente —por ejemplo, en sus consejos, en sus criterios de selección, en su compromiso con la diversidad—ejercen un papel transformador.
«Las empresas que no solo dicen que la igualdad es importante, sino que lo demuestran estructuralmente ejercen un papel transformador»
¿Cómo define el “talento femenino” y por qué es importante visibilizarlo?
Para mí, el talento femenino es aquel conjunto de capacidades, experiencias, trayectorias y visiones que las mujeres aportan al mundo profesional, cultural, social y político, muchas veces sin recibir el reconocimiento que merecen. Visibilizarlo es clave porque crea referentes: niñas, jóvenes y otras profesionales que pueden decir “sí, esto es posible”, “yo también puedo”.
¿Qué expectativas tiene para el futuro de Mujeres a Seguir?
Mi expectativa es que, algún día, esta cabecera ya no tenga que existir porque habremos alcanzado una igualdad real: que las mujeres estén representadas de modo natural y pleno en todos los ámbitos —y que por ello no necesitemos un “premio especial” para visibilizarlas. Al mismo tiempo, hasta que eso ocurra, seguir creciendo en número, diversidad de formato, impacto y profundidad: eventos, foros, contenido digital, alianzas.
«Mi expectativa es que, algún día, esta cabecera ya no tenga que existir porque habremos alcanzado una igualdad real«
¿Qué consejo da a las mujeres que aspiran a liderar proyectos o compañías?
No me gusta dar consejos, pero sí compartir experiencias. Sin duda, que se formen continuamente, que sean valientes y elijan bien a su equipo y entorno profesional. También que no tengan miedo de tomar decisiones; cuando asumí la gestión de la compañía que ahora dirijo sabía que había riesgo, pero quise optar por esa libertad. Que los sueños siempre se pueden hacer realidad, pero hay que ser valiente y trabajar para conseguirlos.


