El porcentaje de mujeres que no se creen preparadas para el teletrabajo es mayor que en los hombres. Entre ellos, sólo uno de cada cinco no se ve capacitado para trabajar desde casa.
Durante el confinamiento ha resultado difícil conciliar la vida laboral y profesional. Muchas familias se han encontrado con la obligatoriedad de teletrabajar, a causa del confinamiento. Además, han tenido que compartir espacio en el hogar con sus hijos e hijas. Y, en algunos casos, con otros miembros de la familia. Una situación que ha sido difícil de gestionar.
La gran duda ha sido si la mujer ha tenido que soportar una mayor carga que el hombre en estas circunstancias. Un reciente informe de Randstad podría dejarnos esta sensación, a tenor del porcentaje de mujeres que se ve incapaz de teletrabajar.
Una de cada cuatro no se siente capacitada para desempeñar sus funciones laborales en remoto.
En total, una de cada cuatro no se siente capacitada para desempeñar sus funciones laborales en remoto. Una medida que es menor en el caso de los hombres. Tan sólo uno de cada cinco responde en este mismo sentido.
¿En qué medida influyen las cargas extras en la familia sobre esta percepción de incapacidad? Es difícil de determinar únicamente con este dato. Pero lo cierto es que las mujeres tienen más problemas para adaptarse al teletrabajo, según los datos del último Randstad Workmonitor, que ha presentado esta compañía especializada en la gestión de los recursos humanos.
Otros datos del informe respecto al teletrabajo
Las empresas españolas no están proporcionando medios tecnológicos suficientes para desempeñar sus funciones desde casa. Así lo entienden el 40% de los empleados y empleadas de nuestro país. A nivel global, sólo el 36% opina en este sentido, por lo que España se encuentra por encima de la media. De hecho, es el tercer país europeo con peor registro, sólo superado por Portugal e Italia. Allí, un 47 y un 41% respectivamente consideran que su empresa no le está facilitando los recursos necesarios.
En lo que a formación se refiere los datos de España son algo más positivos. El 60% de los encuestados valora positivamente la inversión de su empresa en formación, para que pueda teletrabajar. Se encuentra dentro de la media global. Aunque lejos de países como India, China o Estados Unidos, donde un 85, un 82 y un 66% respectivamente, valoran positivamente a sus empresas respecto a la formación recibida.
El 60% de los encuestados valora positivamente la inversión de su empresa en formación, para que pueda teletrabajar.
Inversión por parte de las empresas
En este apartado la posición de España es similar. Un 62% de nuestros trabajadores y trabajadoras considera que sí se está dando la inversión necesaria en sus empresas para dotar a los empleados de equipos tecnológicos que permite teletrabajar. Siendo una cifra similar a países como Reino Unido, todavía estamos lejos de los datos que presentan India o China. En el primer caso, el 90% de los encuestados asegura que sí se les provee de las tecnologías necesarias para cumplir con sus funciones desde el hogar. En el segundo este porcentaje alcanza el 81%.
Datos por sectores
En cuanto a sectores apenas hay sorpresas. Dada la peculiaridad de algunos de ellos, resulta comprensible que se visualicen más dificultades para teletrabajo que en otros. El porcentaje más alto lo encontramos en Sanidad. Como es lógico, en este sector encontramos un mayor número de trabajadores que no se sienten capacitados de desempeñar sus funciones mediante teletrabajo.
Lo mismo ocurre con el ámbito de la distribución, en donde casi uno de cada tres empleados asegura que no se siente capacitado para trabajar en remoto. En el otro lado de la balanza, y también por la idiosincrasia del sector en sí, sólo un 11% de empleados no se ven capacitados para teletrabajar en el ámbito TIC. Y sólo un 16,7 en telecomunicaciones.