Adecco Group Institute, Insead y, por primera vez, Google colaboraron en la elaboración del VI Índice de Competitividad por el Talento Global (GTCI, de sus siglas en inglés) que se presentó este enero en Davos.
De los 125 países analizados, España se sitúa en el número 112 de la lista en la categoría referida a puestos directivos ocupados por mujeres. Esto supone un retroceso con respecto a la puntuación obtenida en 2019. Otro aspecto desalentador que releva el estudio es la constatación de la brecha salarial de género, donde España se sitúa en la posición 50.
«Las mujeres reciben una reducción del salario de un 2% por cada año que pasan fuera de su profesión”, destaca Javier Blasco, director del Adecco Group Institute.
“Según la Unión Europea, en su estudio 2019 Report on Equality between women and men in the EU, la brecha salarial en España está en el 15%, por debajo de la media del 16% de la UE-28. Sin embargo, las diferencias de género son obvias. Basta con echar un vistazo a la presencia de mujeres en industrias y sectores económicos, órganos de decisión o en el tratamiento legal de las interrupciones por maternidad. Las mujeres reciben una reducción del salario de un 2% por cada año que pasan fuera de su profesión”, destaca Javier Blasco, director del Adecco Group Institute.
Si bien las mujeres representan el 51% de la población activa en España, están infrarrepresentadas en órganos de dirección, profesiones industriales y de la construcción, así como en las carreras STEM (siglas que corresponden a Science, Technology, Engineering and Maths en inglés). “Esta renuncia indeseable al talento femenino está lastrando la diversidad, antecedente necesario de la competitividad del talento y de las organizaciones”, comenta Blasco al respecto.
Una mala nota
El GTCI realiza un análisis exhaustivo de más de 100 asuntos relacionados con la economía, el entorno social y aspectos humanos. España mejora ligeramente su posición respecto al año pasado, con el puesto 32. Suiza ocupa, una vez más, el primer puesto, seguido de Estados Unidos y Singapur. Suecia, Dinamarca, Países Bajos, Finlandia, Luxemburgo, Noruega y Australia completan la lista de los top10.
España mejora ligeramente su posición respecto al año pasado, con el puesto 32.
Según analiza el director del Adecco Group Institute “es una mala posición”, teniendo en cuenta que España está en el puesto 10-12 en PBI a nivel mundial. Además de la limitada participación de las mujeres en las posiciones directivas y la falta de igualdad salarial, nuestro país debe mejorar en áreas clave como la colaboración de organismos (107), la relación del salario con la productividad (92) o el desempleo en educación terciaria o superior (92).
La mejor red de aguas del planeta
España consigue ser el número uno a nivel mundial en la madurez del proceso de saneamiento del país. Nuestra red de aguas es, según el GTCI, la mejor del planeta. Además, el país queda bien posicionado en temas como la cantidad de matriculados en educación superior (5), la tolerancia hacia la inmigración (11), calidad de vida, prácticas medioambientales y calidad de las escuelas de gestión, donde obtiene el puesto 12 en cada categoría.
“Educación, innovación y emprendimiento digital deben ir de la mano. Son retos y áreas que deben impulsarse y el papel de la mujer es, aquí, esencial”, expresa Javier Blasco.
Transformación digital y talento femenino
Este año el informe GTCI se concentró en el impacto de la inteligencia artificial (IA) en el talento y el empleo. Cada día comprobamos cómo la IA está cambiando el mundo del trabajo. La incorporación de Google por primera vez al estudio, ha facilitado este análisis, las oportunidades y amenazas.
Según expresa Javier Blasco, “España debería mejorar en cuanto a la adopción de tecnología e IA. Ocupamos el puesto 14 en densidad de robots, pero el 54 en inversión en tecnología emergente. En la variable “uso de la tecnología”, España se queda en la posición 47”. Y concluye: “educación, innovación y emprendimiento digital deben ir de la mano. Son retos y áreas que deben impulsarse y el papel de la mujer es, aquí, esencial”.