Luisa García es la actual CEO Europa de la consultora LLYC -antes Llorente y Cuenca-, una de las consultoras de comunicación, marketing digital y asuntos públicos que más ha crecido en los últimos años. Aunque hace un año que ocupa la máxima posición, es parte de la compañía desde hace más de dos décadas y lideró su expansión en América Latina.
¿Por qué crees que fuiste nombrada CEO de la compañía?
Creo que tengo buen equilibrio entre la audacia y la osadía con la gestión y la organización. Soy una buena gestora, organizo bien a los equipos. Creo que tengo ese buen balance. No soy creativa por profesión pero me conecto bien con el mundo de la creatividad y tengo mucha conexión con el mundo de la gestión. Eso me ayuda a crear equipos donde los que tienen uno u otro perfil se sienten impulsados.
Mi propósito personal es inspirar y multiplicar. Nuestro rol es ayudar a que otros brillen y a que las buenas ideas tengan impacto.
Antes de ocupar este cargo, estuviste 16 años en América Latina. ¿Cuál era tu rol desde allí?
Durante ese tiempo empecé la operación en Panamá y también pude dirigir otra muy grande y madura en Perú tras lo cual pasé a ser chief officer para toda América Latina. Una experiencia muy interesante. Conocer toda la región me ayudó a desarrollar una mirada diferente de nuestra profesión en función no sólo de los mercados, sino de cada uno de sus momentos políticos, algunos de mucha inversión y otros de inestabilidad económica y política.
¿Cómo tomaste la decisión de irte?
No me costó mucho irme a América Latina. Fue algo muy casual. José Antonio Llorente me llamó un día en 2002, cuando yo llevaba poco en la firma, para proponerme irme a desarrollar un proyecto a Panamá. En ese momento yo era directora de cuentas en la oficina de Madrid. Ganamos la propuesta para un proyecto que, en principio, iba a ser de 6 meses. Pero al poco tiempo, vimos que era un mercado con muchas oportunidades y le propuse a los socios abrir oficina en Panamá.
¿Cuando regresaste a España y con qué objetivo?
Regresé a finales de 2018 y ahí emprendemos una nueva etapa de desarrollo y transformación de la compañía, que tiene dos vectores: tecnología y creatividad. Estamos integrando esas disciplinas, ver cómo conviven con nuestro mundo tradicional de la comunicación corporativa, los asuntos públicos y en qué medida merece la pena mantenerlas como disciplinas separadas. Es un reto de gestión apasionante porque el desarrollo sigue siendo de crecimiento orgánico también. Además, en el último año, hubo un importante trabajo de crecimiento inorgánico con dos adquisiciones muy importantes que son las agencias Apache y China.
antes nuestro cliente era el director de comunicación, hoy también son directores de marketing, recursos humanos o miembros del consejo de administración.
De Llorente y Cuenca a LLYC, ¿cuál crees que es el punto de inflexión y la incidencia de tu gestión en eso?
Somos una firma de socios y me cuesta identificar un punto de inflexión individual. Creo que en el grupo de socios principales compartimos una agenda de innovación permanente y cada uno de nosotros tiene el encargo de hacer eso realidad en su área de actuación, que puede ser un área de especialidad, un área geográfica o un área de apoyo.
¿Cómo se compone hoy LLYC?
En total, somos más de 1.100 personas, en España y Portugal entre 400 y 450. No hay ningún departamento de comunicación en España que tenga esa cantidad. Pero lo más divertido, y es una de mis prioridades como gestión, es que hace 5 años el 70% eran periodistas o publicistas, pero hoy también tenemos politólogos, tecnólogos y más, ampliando el abanico de las personas con quienes trabajamos. Es decir, antes nuestro cliente era el director de comunicación, pero ahora trabajamos también con directores de marketing, de recursos humanos, miembros del consejo de administración. El impacto de nuestra profesión es muy relevante. Desde la perspectiva de gestión, es brutal.
¿Cuál es la clave del éxito y crecimiento de la compañía?
Creo que una de las razones del éxito en comparación con otras firmas de nuestro sector es el modelo de nuestros profesionales. Eso es mérito de José Antonio Llorente, el decidir que compartiría la propiedad de la compañía con más gente, porque aunque nuestro trozo de pastel sea más pequeño, la tarta será más grande. De esa manera, tendremos una retención en los perfiles más altos.
La gente ve carrera profesional, tiene compromiso con el proyecto y siente que tiene un retorno de eso, pero además se siente partícipe de las decisiones estratégicas. Todos aportamos, todos opinamos.
¿El broche ha sido la salida a Bolsa?
El año pasado hicimos la salida a bolsa, que también es un hito corporativo muy interesante. Lo hicimos el mismo año en que compramos tres compañías, dos de ellas en España y una en México, cuando todavía estábamos lidiando con la pandemia. Creo que es porque tenemos estructurado un buen sistema de gobierno corporativo, buenos modelos de gestión, donde cada uno tiene claro de qué es responsable y por tanto, mientras el negocio avanzaba, otras personas se podían dedicar a organizar la salida bolsa. Y, finalmente, porque hemos sabido trasladar ese ADN emprendedor a todo el mundo: somos muy disciplinados y ordenados pero no olvidamos lo importante que es el intra emprendimiento.
¿Tus próximos desafíos?
Vincular la transformación con la tecnología es fundamental y debemos hacerlo desde los más altos niveles de la organización y de nuestros clientes. Medir el impacto de lo que hacemos, cambiar las estrategias a mitad de camino cuando es necesario. Y hay un desafío fundamental en la IA o inteligencia artificial y de los sesgos derivados de quien la programa. Y otro no menor y en el que estamos trabajando, tiene el idioma como eje. Los sistemas se desarrollan en inglés y lograr que el castellano y los hispanohablantes no estemos en desventaja es un reto brutal y urgente.
¿Un propósito personal?
Surge de algo muy bonito que me dijo un colega: tú inspiras y multiplicas. Me lo apunté como propósito personal. Para quienes estamos en altas posiciones, nuestro rol debe ser ayudar a que otros brillen y que las ideas tengan impacto, eso es inspirar y multiplicar.
Identikit
- 3 películas: The usual suspects. La vida de Brian. Memorias de África
- 3 actores/actrices: Kevin Spacey (a pesar de todo). Olivia Colman. Al Pacino
- 3 series: Succession. Hacks. The Good Wife
- 3 libros: A widow for one year (John Irving). (Joan Didion). The sense of an ending (Julian Barnes)
- 3 autores/as: Paul Auster. Ian McEwan. Claire Messud
- 3 canciones: Don’t you worry ‘bout a thing (Stevie Wonder). Brown Eyed Girl (Van Morrison).Charo (Quique González)
- 3 apps indispensables: Todoist. Evernote. Password
- 3 referentes vivos/as: Barack Obama. Gloria Steinem. Adam Grant.
- Un perfume: Bal D’Afrique (Byredo)
- Un lugar al que volverías: Casi todos. Encabeza la lista Tailandia.
- Una frase, un lema: “Cuantas más cosas haces, más cosas haces”
- Una aspiración: Inspirar y multiplicar
- Una virtud que valores en la gente: Difícil elegir una. Mi mix ideal es la combinación de la inteligencia, la curiosidad, la generosidad, la coherencia, la osadía y la lealtad.
- Temas en los que te enfocas: Igualdad, propósito, activismo de marca, innovación en comunicación
- Hobbies, hábitos que practicas: Yoga un par de veces en semana, buenos paseos, buenas lecturas. Arte que inspira.
- Un consejo para las nuevas generaciones: La amistad es un tesoro.
- Un secreto de dirección: Déjate ayudar.
Más sobre Luisa García
Socia de LLYC y actual responsable de las operaciones en España y Portugal, ha sido COO de la firma para América Latina y parte del equipo que lideró la expansión de la compañía en esa región, incluyendo la apertura de la oficina en Panamá o la consolidación de las operaciones en la región andina como líderes en sus mercados. Con más de veinte años de experiencia en consultoría de comunicación, con proyectos de alto impacto para multinacionales como Coca-Cola, ABInbev o Telefónica. Ha sido reconocida como Mujer del Año en Comunicación y en Servicios Corporativos por los Stevie Awards for Women in Business y, como una de las 50 mujeres de negocios más influyentes en América Latina por Latin Business Chronicle. Cuenta con un MBA por la Universidad Adolfo Ibáñez y estudios de post -grado en Georgetown University. Es Licenciada en Publicidad y Relaciones Públicas por la Universidad Complutense de Madrid.
