La Fundación Princesa de Girona ha premiado ex aequo a los químicos María Escudero y a Guillermo Mínguez en la categoría de Investigación Científica. El jurado ha resaltado sus «brillantes» trayectorias en el estudio de nuevos materiales y el «ser modelos a seguir para la juventud investigadora española». La fundación continúa en Sevilla la ruta, iniciada en Mérida el pasado día 7, por cinco ciudades españolas para dar a conocer a los ganadores de las diferentes categorías.
Investiga con nuevos materiales que, a partir de reacciones electroquímicas, permitan obtener energía limpia y producir compuestos químicos y combustibles.
María Escudero (Cáceres, 1983) investiga con nuevos materiales que, a partir de reacciones electroquímicas, permitan obtener energía limpia y producir compuestos químicos y combustibles. Desde marzo de 2017, es profesora en la Universidad de Copenhague, donde dirige el grupo de NanoElectroquímica. Licenciada en Química por la Universidad de Extremadura y doctora en Química por la Universidad Autónoma de Madrid (UAB), Escudero ha recibido el Premio Joven Químico Europeo 2016 y el Premio Investigador Joven de la División de Energía de la Sociedad Americana de Electroquímica 2018.
Guillermo Mínguez es licenciado en Química por la Universidad de Sevilla y doctor por la Universidad de Sheffield (Reino Unido). Mínguez (Sevilla, 1981) es investigador del programa Ramón y Cajal en el Instituto de Ciencia Molecular de la Universidad de Valencia, donde lidera cuatro proyectos. Su investigación se centra en el desarrollo de nuevos materiales porosos, conceptualmente diferentes de los ya existentes, que sean capaces de almacenar muy selectivamente ciertos gases y, por tanto, que tengan aplicación en su separación.
‘Contribuirá a frenar el cambio climático’
La organización reconoce a Escudero «por su trabajo en el desarrollo de catalizadores electroquímicos basados en nanopartículas metálicas con la finalidad de sustituir metales nobles para reducir los costes y aumentar la eficiencia en procesos de obtención de energía limpia. Se destaca el impacto científico, tecnológico, energético y social que contribuirá a frenar el cambio climático».
Por su parte, de Mínguez se resalta su «trabajo en el diseño de tamices moleculares híbridos que permite la síntesis de materiales nanoestructurados a la carta. Se destaca el impacto de sus trabajos en MOF (Metallic Organic Frameworks) magnéticos, desde su estudio fundamental hasta su aplicación en sensores y en catálisis. Los nuevos materiales porosos desarrollados tendrán una gran repercusión en campos como el medioambiente y energía».
El jurado ha estado formado por la bioquímica Fátima Bosch, el químico Avelino Corma, la filósofa Adela Cortina, el cardiólogo y director general del CNIC Valentín Fuster, el sociólogo Emilio Lamo de Espinosa, el investigador Samuel Sánchez, el físico y presidente de los rectores europeos Rolf Tarrach y el físico Lluís Torner.