Que haya intentado llegar a la vicepresidencia de los EEUU y tuviera 5 hijos pudo ser un buen comienzo. Pero a la vista de lo sucedido, Palin será sin dudas no sólo el chivo expiatorio republicano, sino la más castigada de la contienda. Y con razón, mal que nos pese.
Pocas horas antes del final Palin dijo: ´Siempre seré Sarah de Alaska. Aunque mañana espero levantarme como vicepresidenta de Estados Unidos´. Habrá que ver de qué manera recibe ahora Alaska, a la hija pródiga.
Podía haber sido pero no fue. Se quedó en el camino no sólo por las malas artes de una prensa ávida de castigarla o amplificar cualquier traspié, sino porque ella sola supo ganarse un lugar de descrédito. Que la llamaran "la dama del rifle" recordó a aquello de "la dama de hierro". Para algunas feministas sólo era una más de las habituales formas de descalificar en una mujer, lo que en un hombre se vería con menos dureza.
Sin embargo, la gobernadora de Alaska fue jalonando el camino de su campaña de "hitos" con los que alimentar a las fieras y alejar a las mujeres que en algún momento se engañaron con que podría ser un referente femenino. Hillary había quedado fuera de la batalla, ¿podría Palin ser la mujer que ocupara un lugar de peso en la escena política norteamericana?
Según la cadena Fox de televisión, que no identificó sus fuentes, ya en la campaña habían surgido dudas sobre la preparación de Palin y para dar un ejemplo se refirió a que la candidata no sabía que África era un continente -y no un país- y que no supo enumerar las naciones que firmaron el Tratado de Libre Comercio para Norteamérica. Palin se defendió diciendo que sus declaraciones se habían sacado de contexto y trató de "imbéciles" a los autores del comentario. Sin embargo, la perla para quienes querían verla fuera de la cancha, no se la jugó ni un opositor ni un partidario, fueron dos integrantes de un dúo cómico de Québec que imitando al presidente francés, Nicolas Sarkozy, lograron que aceptara una invitación para cazar crías de focas al tiempo que aceptó de buena gana que podría ser candidata a la presidencia de su país en 8 años.
La guinda de la tarta la puso la revista Newsweek, que desveló que durante la campaña la gobernadora republicana se compró un amplio y elegante vestuario no sólo para ella sino también para su familia, cuyo costo superó "en varias decenas de miles de dólares" a los 150 mil admitidos. Palin, con escaso rubor, se ha mostrado dispuesta a devolverlo todo aunque defendiendo que estos gastos eran necesarios para la campaña, tanto "como los altavoces de los mítines". ¿Falta de pericia, idiotez, soberbia? ¿O de todo un poco? De uno y de otro lado habrá parte de cierto y parte de falaz, pero a la luz de lo sucedido, el mayor talento de Palin ha sido unir a la crítica contra sí misma.
Está claro que hasta que las mujeres no "regularicen" su presencia en los ámbitos de poder en general y en la política en particular, los ojos que las miren serán más atentos y los juicios que se hagan más severos. Son las reglas del juego que no hemos hecho. De todos modos, ciertos errores no tienen sexo. O no deberían tenerlo. Esperemos que Obama, sepa elegir a los hombres y mujeres que lo acompañen.