La sonrisa, el físico, los gestos o, la simpatía son los más habituales. Pero si te deslumbra la inteligencia, eres sapiosexual.
La seducción a través de la inteligencia es más habitual de lo que parece, según Javier Aparicio, experto de Mundopsicologos.com que da pautas sobre el tema.
¿Eres sapiosexual?
Una profunda atracción por los aspectos intelectuales y morales definen la sapiosexualidad o a la persona sapiosexual. Si el deseo, el placer y la atracción es la base de toda su sexualidad, la atracción por la inteligencia de otra persona se suma a esta categoría. Este componente de carácter intelectual provoca una conexión emocional que les lleva al amor o al deseo.
Las mujeres más proclives al placer “mental”
Tanto hombres como mujeres son sapiosexuales, ya que la sexualidad no discrimina de gustos o sexos. En el caso de las mujeres tienen una mayor orientación a esta tendencia; ya que la excitación, deseo, y placer femenino es más mental que en los hombres.
¿Y la atracción física?
Si hablamos de términos mentales y físicos, la atracción física es importante también aquí. Solo que el plano físico o la belleza quedan ligados a la parte intelectual. Es decir: siempre que se perciba la inteligencia se percibirá también el deseo por la belleza física.
Quizás alguna vez hemos podido ser un poco sapiosexuales, no hay por qué serlo de forma exclusiva y toda la vida, ya que la sexualidad es un proceso creciente en nuestra evolución individual.
Las relaciones sapiosexuales se convierten en relaciones clásicas de pareja, pero con un alto contenido intelectual en todo el ciclo de la relación. Suelen ser parejas que están en una constante culturización y romanticismo intelectual. No quiere decir que no tengan crisis de pareja o que sean más o menos duraderas; ya que esto depende de muchos factores individuales.
¿Sexo mental o psíquico?
La gran pregunta es: “¿Se puede llegar a alcanzar un orgasmo sólo con la seducción de la mente y sin estímulos físicos con la intelectualidad?”
El sexo en estas parejas puede ser como en cualquier otra. Solo habría una gran diferencia que es el llamado “placer psíquico”. Este placer está asociado a fuertes sentimientos de felicidad, alegría, buen humor y equilibrio que se producen a nivel mental.
En estas parejas este placer está sobre-aumentado y es el que provoca los llamados “orgasmos mentales”. Un orgasmo real también puede ser logrado con la seducción mental sin contacto, aunque deben activarse los componentes fisiológicos, que lo provocan y esto no es cosa solo de los sapiosexuales, es algo que podemos lograr todos.
Los orígenes de la teoría sobre la persona sapiosexual
El término se acuñó a principios de siglo XXI, sin embargo esta tendencia viene de muchos siglos antes. Si tuviéramos que poner un nacimiento Nos remontaríamos a la Antigua Grecia (1200 a. C.-146 a. C). En esta época la sexualidad era abierta y la educación sexual se realizaba en los círculos más cultos y aristocráticos. Más acá en el tiempo, un ejemplo parecido sería el amor cortés de la Edad Media (476 d.C. – 1453). En este amor la admiración por las cualidades morales de la dama y la evitación de la relación sexual lo eran todo.
