Sólo 28 de las 500 empresas más importantes de la provincia tienen al frente a una fémina. Ante este panorama poco alentador, se inauguró la primera mesa redonda “Mujeres y empresarias: motor de cambio”, del tercer Congreso Castelló 2020, que organizan la UJI y Mediterráneo.
Allí las mujeres castellonenses de éxito reivindicaron su papel, a pesar de contar aún con un déficit en los puestos directivos, y animaron a los empresarios/as a confiar más en el talento femenino para los puestos de responsabilidad.
Las dificultades para la conciliación familiar y laboral, en un 70,8% de los casos, se presentaron como el gran obstáculo para acceder a altos cargos, que a nivel de España solo ocupan un 11%. En el foro, moderado por Asunción Ventura, vicepresidenta de la Fundación Isonomía, dieron su visión Marta Castellano, directora web de la agencia Efecto Márketing; Esther Castellano, directora general de Efecto Márketing y presidenta de la Asociación de Agencias de Publicidad de la Comunitat; Francisca Meliá, Relations Manager de la Asociación Europea de la Industria del Petróleo, en Bruselas; y Ana Belén García, socia de la consultora Dualium y presidenta de la Asociación de Mujeres Directivas de Castellón, recién constituida, y en la que están implicadas las ponentes.
García adelantó que la asociación, que agrupa a directivas y empresarias y se presentará en breve, va a ofrecer apoyo a las emprendedoras e incluso actuará como lobby y, a través de un plan estratégico, para atraer inversiones de empresas a Castellón, buscando la internacionalización.
Las participantes dejaron constancia de la idiosincrasia laboral femenina frente a la masculina, basada en aptitudes “innatas”, como destacaron las representantes desde Efecto Márketing, tales como “constancia, intuición, sensibilidad, manejo de las emociones, flexibilidad para adaptarse a los cambios y compromiso”. Y consideró clave para el éxito su formación: universitaria, con posgrado, idiomas y coaching.
Las dificultades para la conciliación familiar y laboral, en un 70,8% de los casos, se presentaron como el gran obstáculo para acceder a altos cargos, que a nivel de España solo ocupan un 11%. Al respecto, Meliá recordó que “las reglas del juego laboral las han introducido los hombres y eso es un elemento de poder, pero es importante ir construyendo nuestras propias reglas y compartir experiencias –sin excluir a los directivos– en la asociación”. También defendió ante todo “el trabajo en equipo”. Y resaltó: “Las mujeres tenemos muchas virtudes, pero uno de nuestros defectos es creer que lo podemos hacer todo solas, ser unas superwoman, y eso tampoco es cierto”.
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