La viceconsejera de Cultura y Turismo, Concha Guerra, acompañada por el director general de Fundación ONCE, Luis Crespo, y el director general de Accesibilidad de Fundación ONCE, Jesús Hernández, han presentado en rueda de prensa la ll Bienal de Arte Contemporáneo de la Fundación ONCE. Esta muestra, que se celebra por primera vez en la Sala de Exposiciones del Complejo El Águila, dependiente de la Consejería de Cultura y Turismo, se podrá visitar desde el 18 de septiembre al 9 de noviembre.
El eje central de esta segunda edición es, además de la accesibilidad para todos, la presentación de conceptos contrapuestos: lo visible y lo invisible; lo real y lo imaginado; lo tangible y lo intangible; lo presente y lo ausente; etc. Este contraste se refleja, por ejemplo, en las diferencias que se pueden dar en el resultado final de una obra tras el uso de una misma técnica o por el contraste de temas que se oponen entre sí.
En la exposición hay tanto obras fotográficas como pictóricas, digitales, vídeo proyecciones, instalaciones interactivas o dibujos. A través de las diferentes obras, esta muestra enfrenta al espectador a la multiplicidad de puntos de vista en la interpretación de la discapacidad e incide en la legitimidad de la diferencia y el matiz enriquecedor que esta dualidad conlleva.
La comunicación de una realidad a través del arte
Por otra parte, la II Bienal recoge fragmentos de la vida de artistas que, independientemente de su tipo de discapacidad o sin ella, reflejan su interpretación del mundo, a veces de una manera espontánea, otras de forma racional, pero que recomunican a través de esta gran variedad de propuestas.
De los treinta y un artistas de distinta nacionalidad que exponen en esta ll Bienal, más de la mitad tiene algún tipo de discapacidad. Entre los participantes se pueden señalar Chuck Close y Jan Fabre, cuya obra ha cedido el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía; Jaume Plensa, con obra cedida por el Instituto Valenciano de Arte Moderno; y otros como Luis Pérez-Mínguez, Cristina García Rodero, Martín Chirino, Ouka Leele y Gerardo Nigenda.
Por otra parte, durante los meses de septiembre, octubre y noviembre, en el marco de la II Bienal, se realizarán actividades paralelas, como mesas redondas referentes al arte y la discapacidad, a las iniciativas sociales en el campo de las mismas, así como sobre arte y terapia y sobre la profesionalización de ramas como el teatro, el cine, la danza y la música en personas con discapacidad; ciclos; y talleres de fotografía, audiovisuales, vaciado de yesos, dibujo y calcografía.
La cultura, un derecho fundamental
Este proyecto nace como respuesta a la necesidad que tienen las personas con discapacidad de acceder a la cultura de una forma normalizada y de eliminar prejuicios sobre la creación artística por parte de las personas con discapacidad. Según la Declaración de Derechos Humanos, "todo el mundo tiene derecho a participar plenamente en la vida cultural de la comunidad, a disfrutar de las artes y a compartir el desarrollo científico y sus beneficios".