El evento ´Las Mujeres en el Poder y la Toma de Decisiones: Construyendo un Mundo Diferente´ cuyo escenario fue Santiago de Chile del 27 a 28 de febrero de 2015, concluyó con un clamor: El mundo y las mujeres no podemos esperar más! El reclamo a los gobiernos y al sector privado es que se tomen medidas contundentes para cerrar la brecha de la desigualdad y así alcanzar las metas establecidas hace 20 años durante la 4ta Conferencia Mundial sobre la Mujer que resultó en la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing. Unidas para el logro de la igualdad de género, ya. Un llamado a la acción que espera urgente respuesta.
La Presidenta de Chile Michelle Bachelet firma el Llamado a la Acción durante la ceremonia de clausura de la reunión de alto nivel sobre "Las Mujeres en el Poder y la Toma de Decisiones: Construyendo un Mundo Diferente," el 28 de febrero de 2015.
Hoy, ningún país ha alcanzado la igualdad de género en todos los ámbitos de la vida pública y privada, y la desigualdad entre mujeres y hombres continúa persistentemente. Tras dos días de intenso debate sobre el progreso alcanzado desde la adopción, en 1995, de la Plataforma de Acción por 189 países, las y los líderes del mundo determinaron que estos han sido lentos y desiguales. Hoy, ningún país ha alcanzado la igualdad de género en todos los ámbitos de la vida pública y privada, y la desigualdad entre mujeres y hombres continúa persistentemente.
“Al ritmo del progreso actual, se necesitarán 81 años para lograr la paridad de género en el lugar de trabajo, más de 75 años para alcanzar igual remuneración entre hombres y mujeres por el mismo trabajo realizado; y más de 30 años para lograr el equilibrio entre mujeres y hombres en los puestos de toma de decisión”, así lee la introducción del documento oficial del Llamado a la Acción generado durante la conferencia.
El Llamado a la Acción declara que este es un año crucial para la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres, pues aún los compromisos para lograr el equilibrio entre mujeres y hombres en los puestos de liderazgo no han sido cumplidos.
“Estamos llamadas y llamados a avanzar mucho más de lo que hemos logrado recorrer hasta ahora”, dijo la Presidenta de Chile, Michelle Bachelet, durante su intervención en la ceremonia de clausura.
“Estamos llamadas y llamados a acelerar los ritmos de los cambios para alcanzar la equidad plena, no en siete u ocho décadas, si no muchísimo antes. Tenemos un compromiso con la nueva generación y con garantizar que las niñas que hoy están naciendo no deban soportar toda una vida de discriminación y postergación”.
Para agregar al mensaje de la Presidenta Bachelet, el Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, enfatizó que el mundo nunca alcanzará el cien por ciento de su potencial si se continúa excluyendo al cincuenta por ciento de la población mundial. “Este es un llamado a la acción alto y claro, y hoy decimos al mundo que no puede ignorar este llamado. El mundo tiene que responder. Hemos esperado suficiente y ahora es el momento de actuar y cerrar las brechas, remover los obstáculos e invertir en las mujeres y las niñas para ir de las palabras a la acción, no el próximo año ni mañana, ahora.”
Haciendo referencia a la ubicación donde se realizó la conferencia, la Estación Mapocho, la Directora Ejecutiva de ONU Mujeres, Phumzile Mlambo-Ngcuka, dijo, “Estamos aquí en una estación que ha sido rediseñada para otra finalidad. Estamos aquí para también ser rediseñadas y rediseñados y así poder servir un propósito más fuerte. En una estación se reúne gente y hoy nos reunimos aquí como amigas y amigos y como colegas. En una estación las personas van a diferentes destinos con sus propios propósitos, y es precisamente esto lo que haremos: nos iremos de aquí con un propósito más fuerte y determinado para lograr la igualdad de género”.
El Llamado a la Acción se enfoca en tres objetivos específicos: lograr un renovado compromiso político para eliminar los obstáculos aún persistentes y garantizar la implementación plena de las 12 áreas críticas de la Plataforma de Acción de Beijing para 2020; lograr el empoderamiento de las mujeres, el cumplimiento efectivo de los derechos humanos de mujeres y niñas y el fin de la desigualdad de género para 2030; y acabar con la brecha de financiación para la igualdad de género equiparando los compromisos con los medios disponibles para su cumplimiento.
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