Aquella madrugada, tras varias horas de tensión sostenida por los resultados que se iban conociendo de los “votos electorales” (por oposición a los votos individuales) en los distintos estados de Estados Unidos, acabamos en estado de shock. Sí, en estado de shock porque no ha sido el resultado esperado. Se sabía que estarían muy cerca, increíblemente igualados, pero no se esperaba que ganase Donald Trump.
En minutos, el perfil de Twitter de Donald Trump se actualizó a “President Elect”, dejando las cosas claras. Hoy día lo que aparece en las redes es lo que existe.
¿Cómo fue posible?
La población, se sigue preguntando ¿cómo ha sido posible?. La distribución de votos es significativa: en las costas Este y Oeste, zonas de concentración urbana, de profesionales y empresarios o emprendedores, han votado a una mujer sobradamente preparada (incluso en Washington la proporción ha sido 93%-7%). Mientras, en la zona central del país, menos densamente poblada, más rural, ex-industrial, han votado más a Donald Trump.
Quién es Donald Trump
Trump es ese hombre sin apenas formación, con seis quiebras de empresas a sus espaldas, que ha perdido su patrimonio y a quien lo único que le queda es su nombre, su marca. Con ello ha jugado: una buena marca o una marca fuerte oculta todo lo que tiene detrás. Y cuando se destapa, enseguida queda minimizado.
Además ha dicho lo que su electorado quería oír. Es el suyo un electorado que ha sufrido mucho durante la campaña. Y poner en práctica los dichos, no depende de él. Siempre habrá por lo tanto buenas razones para no cumplir lo prometido.
Condoleeza Rice hace pocos meses, respondía precisamente a la pregunta de si no le preocupaba que un presidente como Donald Trump tuviese los códigos nucleares…
“Los padres fundadores quisieron sabiamente que ninguno de los órganos o las instituciones tuviese todo el poder, hace falta el concurso de varios de ellos para poder hacer algo”.
Recordemos que a Trump le había retirado su apoyo la mayoría del Partido Republicano. Y que ahora tiene mayoría en el Congreso y en el Senado.
Hillary quedó en el camino
Estas elecciones no serían muy distintas de otras en las que un candidato gana y otro pierde. Si embargo, sí es la primera vez que una mujer llega a la carrera final hacia la Casa Blanca. Antes lo intentó pero ganó ante el actual presidente Obama. Ahora, Hillary ha tenido 200.000 votos más que Trump, pero no son esos los que cuentan.
¿Y ahora qué?
Los resultados determinaron la gestación de una reacción compleja. La frustración de miles y millones de votantes que no reconocieron al recién elegido presidente como el representante de “su” país se vio en la calle. Horas después, en Nueva York, pero también en Wisconsin, en Oklahoma, en Los ángeles, y en muchas más ciudades, se producían manifestaciones en las que el grito de “not my President” fue el elemento común.
Algunas manifestaciones aún hoy, son violentas.
La mayoría se producen frente a los edificios que el Sr. Trump tiene con su nombre por el país. Esto es la primera vez que sucede.
El miedo y la incertidumbre
Además de lo que sabemos, subyace una preocupante situación. Mucha gente ahora tiene miedo. Miedo a la deportación, a la encarcelación, al castigo irracional. Miedo sólo por no ser anglosajón, blanco, y heterosexual.
Sí, la xenofobia ha vuelto.
Hace unos días escuché por la calle: “f**k the Spanish”, refiriéndose obviamente a los Hispanos. Hace mucho que no se veía esa reacción. Aunque también es razonable que se sientan “invadidos”.
Luego, el contrasentido es que en el restaurante Cipriani -que no es barato- todos los clientes y el 90% de los camareros hablábamos español. Había de los más diversos países, gente “bien”, con nivel adquisitivo y cultural, la mayoría de los camareros eran todos hispanos, menos uno serbio y una italiana.
En fin, pensé…es una segunda colonización. Y eso es lo que evidentemente ha despertado una reacción. Eso, es contra lo que se han rebelado algunos, y han votado a Trump.
Y finalmente el Brexit
Los antecedentes del Brexit ponen más fácil elucubrar trayendo al ruedo situaciones análogas. California plantea la independencia para 2019, confiando en que no se produzca.
Mientras, esperamos que los ánimos se tranquilicen, y como ya no hay incertidumbre -aunque no les haya gustado el resultado-, las Bolsas suben.
Aún no hay una mujer en la presidencia del país más poderoso del mundo.
Y el mundo sigue….
*María Jesús Alonso es abogada y socia fundadora de Women in business
