Los resultados de la representación española en las Olimpiadas de Londres, prácticamente dos tercios de las medallas, conseguidas por nuestras deportistas ( http://goo.gl/KYuaE), viene a romper otro de los tópicos sobre la condición femenina. El de que físicamente es inferior, que su cuerpo es débil, que nunca podría llegar al nivel del hombre en este campo.
Personalmente celebro que todos estos tabúes, casi siempre utilizados de forma sesgada por el machismo más rampante, vayan cayendo uno tras otro. Primero fue la supuesta cortedad intelectual de la mujer, (sin olvidar que hace demasiado poco tiempo se afirmaba que “tener alma” era una característica exclusiva del varón); sin embargo, tanto en el ámbito estudiantil como en el profesional, los resultados han demostrado que, no sólo iguala sino que en muchos casos supera, a sus compañeros de sexo masculino. Viene a sumarse ahora un campo nuevo, el de la condición física, donde el sexo femenino está demostrando que también tiene mucho que decir.
Personalmente celebro que todos estos tabúes, casi siempre utilizados de forma sesgada por el machismo más rampante, vayan cayendo uno tras otro.A poco que se reflexione sobre como la mujer está escalando posiciones en todos los ámbitos y porqué ha transcurrido tanto tiempo sin que todas estas capacidades femeninas se hicieran patentes, es fácil darse cuenta que se ha debido a las muchas barreras con las que un mundo, liderado por valores masculinos, ha ido encasillando a la mujer. En la medida que esas cortapisas han ido cayendo y la mujer ha podido poner en valor y desarrollar su potencial, es cuando se ha empezado a ver todo lo que puede conseguir.
Alguien podría rebatir apuntando que han conseguido medallas sí, pero compitiendo con oponentes de su mismo sexo, que físicamente no podrían competir en un equipo mixto. Bien, es probable que hoy sea así, pero tal vez lo es porque su incorporación al deporte de competición es todavía muy reciente. A partir de aquí, ya con idénticas oportunidades de entrenamiento y superación que los varones ¿seguirá ocurriendo los mismo? Apuesto a que no será extraño ver en el fututo como mujeres superan deportivamente a hombres compitiendo juntos en la misma lid.
El paradigma del éxito femenino reside por tanto en dar libertad a las capacidades que toda mujer tiene, no poner cortapisas, dejar que el potencial femenino se haga patente y se desarrolle. Cuando no se ha hecho así, estoy convencido de que no ha sido tanto porque se haya considerado a la mujer un ser inferior, sino más bien por miedo a que al darle libertad pudiera tambalearse el poder y la opresión que durante tanto tiempo un mundo machista ha venido ejerciendo.
Otros artículos de este columnista…
- Poder femenino, ¿lo femenino al poder?
- Y Dios creó a la mujer…
- Reencuentros por Navidad
- Masculino y femenino: Paradojas
- Ser sostenible o no ser
- Igualdad sí. Diversidad, también
- A vueltas con la RSE
- ¿Feliz? Año Nuevo
- Revalorízate: Crea tu marca personal
- ´No importa lo que aprendas, sino al lado de quien te sientes´
¿Ya has visitado Columnistas en nuestra ZONA OPINIÓN?