No existe biblioteca sin antología de Antonio Machado, ni memoria lectora que no guarde como muleta alguno de sus versos. Los inspiradores poemas de Machado son reflejo de sus propias experiencias, de su pensamiento y de su trayectoria como poeta. En ellos se abordan temas tan recurrentes en la psique humana como son la soledad, la melancolía por la infancia, el amor, el compromiso, la pérdida o la humildad. El poeta habla de sí mismo, pero también habla de nosotros; porque sus inquietudes son las nuestras.
Un viaje sobre la obra de Machado que muestra cómo puede guiarnos y acompañarnos, convencidos de que todo lo que se nos ocurra ya lo escribió él.
La autora Elena Medel ha crecido escudriñando los textos del poeta, contrastando su biografía con su producción literaria, y ha llegado a una conclusión: todo lo que se nos ocurra, ya lo escribió Machado. Desde que con apenas trece años descubriera en su hogar familiar un ejemplar con textos del poeta que perteneció a su madre, Medel no ha abandonado esa predilección por los versos de Machado y por conocer el origen de su inspiración. El resultado es una propuesta redactada en habilidosa prosa bajo el título de El Mundo Mago: Cómo vivir con Antonio Machado.
Esta obra realiza un extenso recorrido sobre la trayectoria del poeta enfocando cada capítulo en un tema concreto y arrojando luz a sus versos, en los que muchas veces nos sentimos retratados. Lejos de disertaciones, la autora expone en cada capítulo, de manera casi novelada, la relación de Machado con un tema relevante en su vida y, por extensión, en su poesía. Así, conocemos el vínculo del poeta con los sueños, la poesía, el amor; pero también con el feminismo, el dinero o la educación. Hasta el punto de llegar a conocer Machado en Tuits como máxima expresión de la atemporalidad de su poesía. Tal como expresa Medel, el primer contacto del lector con Machado puede establecerse en la etapa escolar, cuando en ocasiones la lectura puede ser resultado de una imposición. Muchos, como es el caso de la autora, retoman a Machado más tarde, esta vez por elección propia. Y es que Machado les sirve para conocer el mundo y aprender sobre la vida. Y qué mejor guía para acompañarles.
«Resulta difícil hablar sobre Antonio Machado sin hablar de uno mismo. Por gestos como el de un profesor que decide que sus alumnos aprendan de la vida —y aprendan la vida— gracias a sus poemas, por jóvenes que se convierten en adultos y eligen a Machado para acompañarles en ese camino —«ligeros de equipaje», con pocos libros más, porque en ese nuevo hogar forjarán una nueva biblioteca—, y corrijo porque escribí camino cuando sus poemas huelen a tierra y a pisadas, Machado se entiende como un poeta de vida: reconocemos sus versos aunque los leyéramos hace años, los incorporamos a nuestras conversaciones igual que cualquier otra expresión —«la primavera ha venido./ Nadie sabe cómo ha sido»—, de tan escuchados dudamos si le corresponden o si los escribió otro. Hemos leído a Antonio Machado porque nos obligaban en el instituto y hemos leído a Antonio Machado, más tarde, porque nos obligábamos nosotros mismos: los poemas de Machado se leen a modo de I Ching, el oráculo chino, esperando que su lectura nos brinde las respuestas que necesitamos ».
- El I Premio de relatos cortos de humor ya está en marcha
- Imagine France: Un viaje fantástico
- La mujer Ochoa. Modernismo y modernidad
- Pioneras e influyentes
- Costuras a flor de piel, de Koen Suidgeest
- Teresa Calo, firma el guión de un film sobre Juan Ramón Jiménez
- La piedra oscura, un canto de amor a García Lorca
- La Top 100 Pilar Jurado estrena ‘El diablo en el poder’
- Esther Ferrer, Premio Velázquez
- Carmen Laffón, premiada por la Universidad de Sevilla
- Raquel Martín, Premio Pedro García Cabrera