Episodio 6: Domingo de resurrección (o cómo volver a abrir la app sin perder la dignidad)

Era domingo. Uno de esos domingos lentos, de pijama, café y autocompasión elegante.

Después de varios desengaños —unos pequeños, otros dignos de serie completa— decidí hacer lo impensable: abrir la app otra vez.

La abrí con ese respeto que se le tiene a un ex tóxico. Sabes que te va a liar, pero igual lo haces.

Y ahí estaba: el desfile de fotos, las sonrisas impostadas, las bios en modo misterio de X. Pensé que necesitaba una estrategia. Porque abrir una app sin estrategia es como ir a un IKEA con hambre: peligro de tomar malas decisiones.

Así que respiré hondo y me dije: “Esta vez vas a hacer una selección de calidad”. Un filtro consciente y  maduro. Duró tres swipes.

Aun así, tomé nota de algunos tips básicos que la experiencia —y los sustos— me han enseñado:

1. La foto no lo es todo. Sobre todo cuando parece hecha con la cámara de un Nokia de 2002 o en el baño del gimnasio. Si la imagen es borrosa, probablemente también lo sea su comunicación.

2. Las bios dicen más de lo que parece. Si pone “plan tranquilo y Netflix”, significa “no tengo plan ni tele por cable”. Si dice “me gusta más la noche que el día”, tradúcelo como “fiestero con resaca crónica”. Y si prefiere “el día a la noche”, puede que sea de esos que madrugan para hacer rutas de senderismo mientras tú aún buscas el café.

3. “No bebo” no es un problema, pero “no bebo ni socialmente” suele implicar que nunca brindará por ti. Y una copa de vino —aunque sea simbólica— siempre es cultura, gastronomía y, seamos sinceros, filtro de compatibilidad emocional.

4. Si su bio dice que su plato favorito es la tortilla de patata… cuidado. Ese es el comodín del quiero parecer campechano sin esforzarme. La tortilla no define la personalidad, solo la falta de imaginación.

A mitad de la tarde me descubrí analizando perfiles como quien revisa currículums. “Demasiado filtro.” “Demasiado gimnasio.” “Demasiado perro, poca conversación”. Y pensé que, si esto seguía así, iba a montar una agencia que asesorara a los señoritos Match en materia de imagen y bio. Yo siempre pensando en el negocio.

Esa fue mi epifanía de domingo: no todo está perdido si aún puedes reírte del catálogo. Quizá la próxima gran historia de amor empiece con un swipe… O quizá no. Pero mientras tanto, al menos tengo claro que, si alguien me dice que su plan ideal es ver Netflix y comer tortilla, yo ya sé lo que haré: cerrar la app, abrir una botella de vino, y brindar por mí.

— Si aún puedes reírte del catálogo, sigues viva.


El proyecto El amor en los tiempos del Match vive también fuera del papel:
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Marian Gómez Campoy
Marian Gómez Campoy
Marian Gómez Campoy es Periodista y Fundadora del estudio boutique de Relaciones Públicas MGC&Co. Public Relations y de MGC&Co Talent gestión de talentos. Emprendedora nata. Especializada en incrementar la visibilidad de marcas y personas ante sus públicos objetivo en cualquier entorno. Experta en marca personal desde 2012. Trabajando para marcas multisectoriales nacionales e internacionales del sector de la moda, tecnología, belleza, gastronomía, decoración, finanzas, publicidad, teatro, lifestyle, servicios empresariales....etc.

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