En los años 70, la media de edad para tener el primer hijo en España era de 26 años, según datos del Instituto Nacional de Estadística. Esta cifra ha ido incrementándose año tras año, hasta hoy, que la maternidad llega como media a los 31 años, situándonos a la cola de Europa junto con Italia. La Oficina Europea de Estadística (Eurostat) también señala que la media de hijos, 1,32 por mujer, es inferior a la de hace unos años.
9 de cada 10 encuestadas echa en falta alguna ayuda pública o mejores salarios que faciliten la maternidad.
Según una encuesta entre más de 2.000 mujeres, las españolas consideran que la mejor edad para tener el primer hijo está entre los 26 y los 31 años (55%) o entre los 32 y los 35 (25%).
La principal razón para esperar para el 50% de las mujeres es el poder tener una mayor estabilidad económica. El 33% lo hace porque prefiere disfrutar al máximo de la vida antes de tener hijos. Para el 23% lo principal es tener la pareja ideal. Por su parte, el 39% cree que es importante tener hijos lo antes posible para evitar problemas de fertilidad.
Formar una familia
De este porcentaje, el 82% busca quedarse embarazada para formar una familia y porque es un motivo de ilusión tanto para ella como para su pareja. Le sigue, con el 16%, el hecho de sentir el impulso natural de ser madre, con o sin pareja.
Al 62% le gustaría tener dos hijos. El 20% prefiere tres y el 14% se quedaría sólo con uno. Al ser preguntadas si, en una hipotética situación de solvencia económica, con la pareja ideal y un buen puesto de trabajo, con posibilidad de carrera profesional y conciliación, el 42% seguiría optando por tener dos hijos, mientras que las que dicen que tendrían tres ascienden al 39%.
Por último, la encuesta señala que casi 9 de cada 10 encuestadas echa en falta alguna ayuda pública o mejores salarios que faciliten la maternidad. Para el 30% el apoyo más importante es la conciliación, con medidas de teletrabajo y horarios flexibles y para el 24% mejorar las ayudas de baja por maternidad y paternidad. Le siguen los apoyos económicos para tratamientos de reproducción asistida (21%), los de la compra de productos básicos para el bebé (13%) y los del cuidado de los niños (12%).